Reflexiones del día 20.07.11

La unión del pueblo – traerlo hacia la conexión, la Arvut (garantía mutua), es traerlo hacia la compatibilidad con la naturaleza…

• Toda la actividad espiritual es la conexión entre las personas que decidieron dirigirse hacia la conexión, de ese modo fue en los tiempos de Abraham, Moisés y así es en nuestros días.
• El individuo no tiene que pensar en el logro espiritual si no trabaja en ello a través de actividades de conexión con el prójimo – las mismas personas como él que desean conectarse, y comprenden que a través de la conexión adquieren una segunda naturaleza.
• Exclusivamente con la condición de Arvut se puede avanzar hacia la ley "Ama a tu prójimo como a ti mismo" – de manera muy exacta, de otro modo fallaríamos, nos desviaríamos del camino.
• La estrategia es cuando todos se conectan para anularse el uno hacia el otro, en oposición a los disturbios que llegan desde Arriba, desde Maljut de Ein Sof – el lugar en el que nos encontramos conectados.
• Todas las guerras, los problemas, las luchas relatadas en la Torá, en todos los peldaños, en cada estado que pasa la persona – Abraham, Isaac, Jacob, José, Moisés y otros, en total habla de la lucha a favor de la conexión  con el prójimo, hasta la conexiones de amor. No hay más luchas de las que la Torá pueda contarnos. Porque  "Ama a tu prójimo como a ti mismo" es ley, y no necesitamos más que eso para corregir al alma fragmentada.
• Cada uno esta seguro que es mucho mejor que los demás, e incluso si no lo admite, cada uno está seguro y piensa que es el mejor, comprende más  y está más corregido que los demás. Es la fuerza del rompimiento que hay entre nosotros lo que origina eso. Y la persona, seguro que olvida que es como material en manos del Creador, que lo que posee en sí de pensamientos y deseos, así como todo, proviene del Creador. Debemos describirnos a nosotros mismos como materia, inanimado, trozo de arcilla. Y lo que sí podemos despertar departe de la materia como actividad personal, es solamente la conexión con el prójimo, a pesar de todas las condiciones.
• La conexión es la conexión interior entre nosotros - en los deseos, las intenciones y los pensamientos.
• Los nombres sagrados – son formas sagradas, cuando las almas fragmentadas se conectan juntas y comienzan a lograr entre ellas la esencia de la conexión – el Creador – la expresión del ser, la forma de otorgamiento.
• Si deseo relacionarme con alguien con otorgamiento, siento de repente cierto llenado externo o interno. Y esa impresión es llamada "Luz".
• Si nos conectamos para solucionar cierto problema, incluso terrenal, afianzamos a nuestras fuerzas mucho más, pero solamente si deseamos solucionar el problema no para nosotros mismos, sino para toda la nación.
• La primera conmoción que vemos como resultado de ello es que la forma global se viste en nosotros, es que nuestro ego no funciona. Que los autócratas son inoperantes, que los gobiernos y las organizaciones aisladas son inoperantes. Solamente funcionan aquéllos que pueden conectarse entre ellos. Por lo tanto el gobierno pasa de las gobernaciones separadas, apartadas, al pueblo que sabe conectarse – porque es una forma circular, integral y el gobierno no.
• Nosotros actuamos para corregirnos a nosotros mismos, por nosotros mismos corregir al pueblo, y a través del pueblo corregir al mundo.